Una arqueta o arquilla amatoria es un objeto de lujo, que formaba parte del ajuar de los regalos de bodas entre los novios de la alta nobleza desde la plena Edad Media a finales del Renacimiento. Se integra dentro del ceremonial del amor cortés, en el que el enamorado regalaba a su amada una caja suntuosa en la que ella pudiera guardar las joyas o parte de su dote, puesto que esta no podía ser tocada por el marido.
Siempre fueron objetos que se trataban con gran cuidado y detalle en su elaboración, hasta convertirse en auténticas joyas y obras de arte en si mismas. En nuestro caso, contamos con 2 arquillas amatorias, de estilo mudejar catalán de comienzos del siglo XV, conservados en excelente estado.
En este caso particular, las arquetas fueron elaboradas muy probablemente en un taller de Barcelona. Fueron halladas en la iglesia de San Román Román de Hornija custodiadas dentro de un arca del siglo XVI, siendo usadas como contenedoras de reliquias, lo cual influyó decisivamente en su buen estado de conservación. Era muy habitual que estas arquetas fuesen también donadas por la nobleza como ofrendas a las iglesias en pago de diferentes favores y que gracias a ello la iglesia les diese un segundo uso como relicarios y muchas de estas han llegado hasta nuestros días.
Sin embargo, las dos arquetas que custodia la Iglesia de San Román de Hornija, son consideradas por los expertos una rareza, por su notable antigüedad, su calidad ornamental y su originalidad iconográfica en las escenas. Las escenas están realizadas con la técnica de “pastiglia” o pastillaje, en el cual primero se modela un estucado que posteriormente se dora y después se le añade la policromía de los diferentes personajes, dando un fondo dorado a todo la escena propio de la influencia veneciana del primer renacimiento italiano.
Ambas Arquetas, la del Torneo de la Reina y la del Leopardo Coronado, han sido expuestas en diferentes exposiciones artísticas. En el año 2001 lo hicieron en la Edades del Hombre de Zamora “Remembranzas” y en el año 2008 en la exposición “ Caballeros y Caballerías, 500 años del Amadís de Gaula” en el Museo de las Ferias de Medina del Campo.
Descripción de las escenas según el profesor Rafael Domínguez Casas (Catálogo de la exposición “Las Edades del Hombre”, Zamora, 2001, pp.138-141)
"En la arqueta denominada “del torneo de la reina”, las cuatro escenas representadas aparecen de forma seriada, tanto en la tapa superior como en la cara frontal de la pieza. Todas ellas corresponden a episodios de una historia caballeresca, propia de los poemas amatorios medievales del tipo Román de la Rose, con la aparición de dos caballeros que lucen sendas armaduras ante un personaje coronado -quizá la reina-, ante su trono y bajo dosel, en lo que parece ser una escena que cuenta un desafío (a la izquierda, en la tapa superior); la visita de un individuo de difícil identificación a una doncella que se halla en el interior de una torre cilíndrica, con otra figura que parece asomarse por detrás (a la derecha, en la misma tapa); y la reina, ricamente vestida y arrodillada, orando ante una llamas (a la vuelta, entre las dos escenas citadas). Quizá como colofón de las escenas anteriores, en la cara frontal, a ambos lados de la cerradura, aparecen dos caballeros justando, uno de los cuales ha perdido el yelmo. En las tres caras restantes aparecen Ave Fénix –alegoría de la vida eterna- que portan filacterias con la letra “Y”.”
"La arqueta llamada “del leopardo coronado” –así nombrado, en términos heráldicos, al león pasante y mirante, es decir con el rostro hacia el observador-, presenta en la tapa a este fiero animal dotado de una enorme cabeza coronada, seco cuerpo, fuertes garras y larga cola; frente a él hubo originariamente un caballero ecuestre cuya figura se ha perdido, del mismo modo que el Ave Fénix que debió de estar situado, a la vuelta, entre ambas figuras, y seguramente de similar concepción a los que aparecen en las caras anterior y laterales de la pieza; la posterior presenta una garza y un conejo. Todos los elementos figurativos se encuentran en fondos de muy rica policromía, formados por frondosos conjuntos vegetales, flores y plantas, con mariposas y garzas que se alternan con graciosos conejos."
En ambos casos, las aristas verticales de las piezas están guarnecidas por finas planchas de latón, a modo de cantoneras, ornamentadas con labores incisas: de figuras de corazones en el caso de la arqueta “del torneo de la reina”, y con la frase “MERSE QUI / AMOR MERSE” en la “del leopardo coronado”, que recuerda el carácter amoroso de su primitiva función.
Ambas arquetas están incluidas en la exposición permanente del Museo El Descanso de Chindasvinto, en el siguiente horario de visita, siempre y cuando no coincida con celebración de oficio religioso.